Las reacciones alérgicas de hipersensibilidad alimentaria están mediadas por anticuerpos IgG frente a proteínas alimentarias, y se conocen comúnmente como intolerancias alimentarias. Estas reacciones son diferentes a las alergias alimentarias mediadas por anticuerpos IgE, puesto que la reacción es retardada, sin una clara relación causa-efecto, y la sintomatología es muy diversa, moderada y de tipo crónico. El Test A200 determina la presencia de anticuerpos IgG frente a más de 200 proteínas de alimentos de la dieta mediterránea. La eliminación de la dieta de aquellos alimentos con hipersensibilidad proporciona una notable mejoría en un alto porcentaje de pacientes.
El análisis A200 está indicado en aquellos pacientes que presenten alguna de las siguientes sintomatologías clínicas sin diagnóstico etiológico o/y sin mejoría con los tratamientos médicos habituales:
- Trastornos gastrointestinales: dolores abdominales, estreñimiento, diarrea, hinchazón abdominal, náuseas, acidez, úlceras y aftas, gastritis, colitis.
- Procesos dermatológicos: acné, eczema, psoriasis, picor urticaria.
- Molestias neurológicas: dolor de cabeza, migraña, mareo, vértigo.
- Alteraciones respiratorias: tos, bronquitis, asma, rinitis.
- Afecciones psicológicas: ansiedad, depresión, fatiga, hiperactividad.
- Trastornos músculo-esqueléticos: dolor, rigidez, artritis, fibromialgia.
- Otros: retención de líquidos y obesidad